jueves, 20 de febrero de 2014

Autismo: 10 claves para abordar las dificultades en el hogar


El Autismo es un Trastorno que no sólo afecta al niño/a, sino que repercute directamente en los familiares que le rodean. Entender cómo piensa y procesa la información y saber cual es el perfil sensorial de un niño/a con autismo, es fundamental.

Ahora bien, cuando los problemas de conducta aparecen el hogar, los familiares se ven totalmente desolados ante la impotencia de no entender el comportamiento de sus hijos/as con autismo. Si bien en los últimos tiempos los profesionales disponemos de mayor información acerca del autismo y de cómo trabajar en las escuelas y gabinetes especializados, las familias tienen que hacer frente diariamente a las diversas dificultades que se les presentan y que repercuten en su calidad de vida.
Es importante que la intervención tenga lugar en el hogar y que los familiares adquieran las estrategias necesarias para hacer frente a las dificultades. No obstante aquí presentamos 10 claves generales para abordar las dificultades del día a día.

Autismo: 10 claves para abordar las dificultades en el hogar.     

Captura de pantalla 2013 12 15 a las 19.27.22 e1387133669907 Autismo: 10 claves para abordar las dificultades en el hogar

  • Utiliza una agenda y/o panel para anticiparle las rutinas que van a tener lugar durante el día
Los soportes visuales deben ajustarse a cada niño/a con autismo. Pueden utilizarse objetos, pictogramas, palabras, o fotografías dependiendo del nivel de comprensión del niño/a. Podemos empezar por anticiparle dos rutinas e iremos incrementando con el tiempo. Los paneles pueden ser diarios, semanales y mensuales.
  • Delimitar los diferentes espacios de la casa por rutinasseñalizar e1387134353403 Autismo: 10 claves para abordar las dificultades en el hogar
Determina un espacio concreto para cada rutina diaria y que siempre tenga lugar en el mismo sitio ; comer en la cocina, vestirse en la habitación, ver la tele en el salón,… El orden y la estructura son necesarios. La señalización a nivel visual de los diferentes espacios también puede ayudar a tu hijo/a.
  • Darle al niño/a la oportunidad de comunicarse.
IMG 1602 e1387137311588 Autismo: 10 claves para abordar las dificultades en el hogarSi queremos que se comunique, tenemos que darle la oportunidad, y para ello podemos crear situaciones que fomenten la comunicación donde el niño/a tenga la necesidad de pedir. Una buena estrategia es hacerlo en las diferentes rutinas.
Algunos ejemplos; para la rutina de juego metemos en una caja grande los juguetes preferidos del niño/a. Pondremos fotografías a su alcance para que pueda pedirnos el juguete. En la rutina de la comida es un buen momento para poner a su vista refuerzos que sabemos que le gustan; papas, chocolate… Poder elegir qué película ver en la rutina de ver la tele, es otra forma de trabajar la comunicación a través de rutinas.
  • Establece un rincón o espacio de relajación en la casa.
Busca un rincón de la casa que no tenga muchos estímulos donde pueda ir a relajarse en momentos de rabietas descontroladas. Apaga la luz y empieza con la técnica de relajación. Intenta que siempre consista en los mismos pasos.
Los masajes corporales, las canciones o melodías así como los movimientos de balanceo, presionar cuerpo con cuerpo o con almohadas, son algunas de las técnicas que puedes utilizar. Se trata de hacer cosas que relajen al niño/a. Es muy importante que la persona que le acompaña en ese momento esté tranquila y le trasmita calma.
No obstante esto varía en función del perfil sensorial del niño/a. Es por ello que debemos conocerlo y preguntar a los profesionales. Recuerda que tú conoces a tu hijo/a mejor que nadie, y sabes qué le puede relajar.
  • Utiliza las canciones u objetos para los cambios de rutina.
Cuando finaliza una rutina y queremos ir a otra, la música puede ser un gran aliado. Utiliza siempre la misma canción para cada rutina; puede ser referida a la actividad a realizar o simplemente una que sepas que le gusta, pero siempre la misma canción asociada a la misma rutina. También podemos utilizar sus objetos preferidos, si los tuviera.
Esta técnica es muy útil para cambiar de contexto cuando el niño/a muestra una rabieta sin motivo aparente y necesitamos cambiar de ambiente y actividad para cortar la rabieta.
  • Utiliza un lenguaje claro y conciso.lenguaje claro e1387136172495 Autismo: 10 claves para abordar las dificultades en el hogar
Demasiada carga verbal acompañada de movimientos corporales y expresiones faciales puede confundir al niño/a con autismo. Es mejor utilizar frases cortas y que trasmitan un mensaje concreto: por ejemplo, “María, a comer”; en lugar de: “Maria venga, recoge que la comida ya está lista”.
El tiempo de respuesta ante una orden o una pregunta puede ser más lento en el niño/a con autismo. No debemos repetirle una y otra vez el mismo mensaje porque puede obstaculizar el correcto procesamiento de la información. Hay que respetar los tiempos de reacción de cada niño/a.
  • Ser firmes y poner límites
Las normas dentro del hogar son necesarias en cualquier familia. Poner límites puede resultar complicado pero a la larga repercute positivamente en el desarrollo emocional del niño/a con autismo o no.
¿Qué normas poner? Educar es una tarea compleja y cada familia establece las normas según su criterio, pero es importante que no se haga distinción por el hecho de tener autismo o no. La forma de hacerle entender las normas a un niño/a con autismo quizás sea diferente y por ello tendremos que asegurarnos que sean comprensibles.
  • Convertirse en pequeños detectives
detective e1387135543537 Autismo: 10 claves para abordar las dificultades en el hogar
En ocasiones los niños con autismo tienen conductas que no sabemos a qué obedecen, por ejemplo: balancearse, aletear, desnudarse,… Para poder redirigir o extinguir dichas conductas es necesario que las analices. No olvides que siempre tienen una causa y cumplen una función.
Reñirles o distraerlos para que dejen de hacerlo no conseguirá que la conducta desparezca. Con la ayuda de un profesional realiza unanálisis funcional mediante un registro. Mientras tanto trata de no ponerte nervioso/a y escribe en una hoja qué estaba realizando cuando empezó la conducta, quién estaba presente, cómo se siente cuando la realiza,   hora y espacio en la que tiene lugar… Anota durante varias semanas para posteriormente ver qué aspectos se suelen repetir.
Se trata de convertirse en pequeños detectives y poder llegar al origen de la conducta o “manía”. Por otro lado, poder observar sin juzgar la conducta de tu hijo/a te ayudará a conocerlo mejor.
  • Recuerda que tú eres el mejor terapeuta para tu hijo/a y que los aprendizajes naturales surgen como parte de la vida diaria.












sábado, 8 de febrero de 2014

Un 15% de los escolares puede fracasar en sus estudios por déficit sensorial


Dificultades en la escritura o en el aprendizaje, que habitualmente son achacados a la vagancia, pueden deberse a carencias en la integración sensorial, un problema que afecta hasta a un 15 por cien de los escolares y que puede desembocar en fracaso escolar si no se trata a tiempo.

En declaraciones a EFE, el experto Gustavo Reinoso ha asegurado que una de las herramientas que pueden contribuir a ayudar a los niños que se encuentran en esta situación es la terapia ocupacional, una disciplina no demasiado conocida en España, pero avalada internacionalmente por sus buenos resultados.
Diplomado en Terapia Ocupacional por la Universidad Litoral (Argentina) y poseedor de una formación en este área en diversas universidades de Estados Unidos, Reinoso asegura que los niños que padecen estas disfunciones pueden padecer un auténtico calvario en las aulas "porque ven que no pueden hacer muchas cosas que otros desarrollan con facilidad".
En última instancia, esto puede desembocar, si no se trata con prontitud, en autoestima baja, frustración, abandono escolar, y en edades posteriores, en alcoholismo o depresión, advierte Reinoso, co fundador del Advance Therapy Systems (ATS) en Irlanda, un centro especializado en integración sensorial para niños y adultos.
Un infierno similar pueden padecer los padres, que no saben cómo tratar a su hijo porque no aprende con normalidad, a pesar de que, en muchas ocasiones, los dictámenes psicológicos sean normales.
Entonces, las familias inician un peregrinaje por diferentes consultas, que no siempre detectan el problema con acierto.
Reinoso reconoce que "cuesta" llegar a la terapia ocupacional como forma de abordaje de estos problemas y, de hecho, "son los propios padres los que, vía Internet o por el boca a boca, se movilizan para dar salida a la situación de sus hijos".
Por ello, el experto recomienda a los padres que cuando detecten alguna disfunción en sus hijos, "se agrupen, se asocien, investiguen y busquen centros" porque cuando vean que "las cosas tienen un nombre y se pueden solucionar no van a parar".
"Hemos fallado al no escuchar lo suficiente a las familias cuando han hablado de estos problemas", ya que son ellos quienes realmente los perciben.
En este sentido, la terapeuta ocupacional Estíbaliz Barrio, responsable de la Asociación para la Atención de Niños con Alteraciones del Desarrollo "Kulunka", de Vitoria, explica que en España los centros escolares carecen de terapeutas ocupacionales.
Estos profesionales sólo figuran en los Centros de Coordinación Pedagógica, donde un única persona debe atender a varios colegios, por lo que, en la práctica, solo se trata a los casos más graves.
"Además, con la crisis se ha restringido todavía más el campo de trabajo", señala Barrio.
A juicio de Reinoso, esta estrategia es una "mala inversión" por parte de las autoridades educativas, ya que el hecho de contar con terapeutas cualificados en los colegios evitaría que los problemas desembocaran en otros mayores, "mucho más caros de solucionar".
Para no llegar a esta situaciones, Reinoso propone un método de trabajo basado en juegos específicos, ejercicios psicomotores como trepar o saltar, o actividades como sumergirse en texturas, contando siempre con la colaboración del niño.
Según recalca Reinoso, los beneficios de estas fórmulas están avalados por diversos estudios internacionales y hacen que los escolares puedan disfrutar de actividades que hasta entonces no habían imaginado que les pudieran gustar.

sábado, 1 de febrero de 2014

Autonomía en Niños con Síndrome de Asperger

Síndrome de Asperger

El síndrome de Asperger (SA) es un trastorno generalizado del desarrollo cerebral que hace que
 el niño perciba las situaciones cotidianas y su entorno de manera distinta a como lo aprecian
 los demás.
Una de las características del síndrome de Asperger es la poca tolerancia a la frustración, así como al
 cambio repentino de rutinas.
Los niños con síndrome de Asperger son seres excepcionales que entienden el mundo de una manera muy
 peculiar.
Como muchos, anhelan vivir en un lugar donde la justicia siempre reine y la amistad sea un valor que
 represente eterna lealtad.
El problema es que a veces no se percatan de que ese lugar está muy alejado de la realidad.
Tampoco conciben las malas intenciones de la gente o las injusticias; su inocencia no permite
 intuirlas. Debido a esto cuando se enfrentan al ambiente real suelen ser blanco de bromas constantes.
Aún así, siempre abogan por la verdad, son directos al hablar y utilizan palabras muy pomposas o
 rebuscadas, propias de los adultos.
Además, frases como “hay miradas que matan” o “se lo tragó la tierra” son difíciles de entender debido a 
que sus interpretaciones de metáforas, analogías e incluso de simples frases suelen ser literales.
Los niños con síndrome de Asperger tambien son capaces de aceptar los cambios pero lo hacen de
 una manera más lenta que la considerada normal. Además, conforme vayan creciendo esas rutinas 
específicas se podrán negociar.
No tan diferentes
¿A quién no le ha ocurrido que se ha apasionado tanto por un tema que no puede dejar de hablar de él?
Algo similar les sucede a las personas con síndrome de Asperger, la diferencia es que estas desarrollan ese 
interés por una materia en específico a lo largo de su vida, sin cambiarlo y convirtiéndolo algunas veces en
 una obsesión.
Aquí está la importancia de realizar un diagnóstico temprano del síndrome. Cuando la detección se da a una 
corta edad, el tratamiento y los procesos de modificación de conducta se aplicarán más sencillamente que si
 se detecta en la adolescencia.
Estudios médicos afirman que existe una predisposición genética con uno de los padres, generalmente el 
hombre, aunque también puede influir su aparición si se tienen parientes cercanos con autismo.
Los tres síntomas característicos del Asperger se comienzan a percibir luego de los dos años, cuando los 
chicos tienen dificultad para integrarse y comunicarse con los demás, y tienden a apegarse a las rutinas,
 detalla la especialista.
Pero la mayor dificultad la viven cuando pasan de la escuela al liceo, Muchas veces son el blanco de burlas o
 críticas de sus compañeros, lo que los hace darse cuenta de sus limitaciones para relacionarse con ellos. “Se
 los cataloga de excéntricos cuando en realidad tienen una discapacidad social y lo que pasa que como no es 
una discapacidad visible, es más difícil percibirla”.
5 a 1 Proporción de varones en relación a mujeres que padecen síndrome de Asperger. Aparece en 20 a 40 
personas por cada 10.000.
Sugerencias para los padres
Los padres de niños con síndrome de Asperger suelen tener bastante dificultad para resolver las actividades
 diarias de sus hijos. Los expertos resaltan la importancia de mantener la calma y no querer 
resolver todos los problemas de una vez.
Hay que tratar de mantener un contacto visual con el niño para que mire a los padres a los ojos. Para eso,
 las órdenes deben ser concisas y claras. Una vez que eso se logre, es importante que se realicen comentarios
 positivos (no críticos) que gratifiquen el comportamiento.
No se debe utilizar jamás el castigo de forma sistemática. Conviene no olvidar que el niño siempre tend
 más interés en hacer lo que se le pide si obtiene luego algún privilegio a cambio de su esfuerzo.
Otra alternativa es ignorar lo que el niño hace, no mirando ni haciendo comentarios hasta que el 
comportamiento ceda. Sin embargo, hay actitudes que no se pueden ignorar por el riesgo que comportan, 
y por lo tanto, en ese caso lo mejor será pararlos físicamente y potenciar una conducta alternativa.   Es 
importante que los adultos se marquen objetivos realistas y se adapten a las posibilidades y limitaciones de 
los chicos.
Siempre es preferible mantener una buena organización en el ambiente. Los chicos que padecen el 
síndrome no tienen mucha movilidad física y suelen llevarse por delante muebles u objetos. Se los debe 
ayudar a reconocer los espacios cuando éstos estén en orden.
Hay que facilitar la adquisición de sus hábitos de autonomía, entrenándoles en la resolución de pequeñas 
tareas domésticas, como ayudar a servir la mesa, atarse solo los cordones de los zapatos, y ordenar sus 
juguetes y libros.
Para lograr independencia
Difícilmente las personas con Asperger puedan realizar carreras profesionales de más de tres o cuatro años, 
pero sí pueden lograr adquirir perfectamente un buen nivel de autonomía: pueden trabajar, casarse y tener 
hijos.
Para eso sólo hay que tratar de diagnosticar el síndrome lo antes posible, algo bastante complejo según las 
especialistas, ya que se deben realizar varios estudios médicos, psiquiátricos y psicológicos previos, lo que 
muchas veces no se hace. No por negligencia, sino por falta de información.
Ante la evidencia de los primeros síntomas las madres suelen llevar al pequeño al pediatra, cuando ellos no 
tienen las herramientas necesarias para diagnosticar el mal el problema es que cuanto más tiempo se deja 
pasar, el niño puede correr riesgos de aislarse más y deprimirse, por lo que es necesario un diagnostico 
certero a temprana edad.